viernes, 23 de julio de 2010

¿COMPARARSE?

Los momentos más críticos de la vida pueden ser los que nos brinden más sabiduría. Por eso, cuando hay dolor, conviene escucharlo.

La auto comprensión desarrolla sentimientos de amor hacia uno mismo y cultiva la esperanza de que, tarde o temprano, recuperaremos el equilibrio.
El dolor es inevitable pero el sufrimiento es opcional. Sufrimos en la medida en la que rechazamos ciertas características de nuestra persona o vida.
Cuando aceptamos la realidad, esta se transforma dando lugar a nuevas posibilidades. Sufrir es conectar con la naturaleza humana y, por ello, brinda esa fuente de sabiduría.
Un hombre con una idea nueva es siempre un loco hasta que la idea triunfa.

Entonces, se vuelve un genio.
La intuición es una herramienta más de nuestra lista de recursos.
Discernir qué es lo realmente importante para nosotros nos allanará el camino para conseguirlo.

Divide y vencerás.
En la vida es necesario priorizar, organizarse y ser prácticos, incluso en las cuestiones más espirituales.
¿Cuáles son las prendas más importantes de nuestra vida?
¿Cuántas cosas no necesitamos en realidad?
¿Cuáles son esos aspectos que si les prestásemos más atención, nos ayudarían a ser felices?
Trasnochar cansa menos.
Jugar fomenta la igualdad.
Soy el único causante de todo lo que me sucede.
Solamente cuando madura cae el fruto de la fortuna.
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el perfeccionismo es una derivación deformada de la exigencia su manifestación más extrema, tanto uno como la otra pueden provocar parálisis, incapacidad de actuar.
Cada cosa que haga, diga o produzca será, en su creencia, decisiva.
Cuando alguien se siente inseguro, se vuelve temeroso.
Los seres humanos somos en esencia seres condicionados.
Siempre habrá algo que no depende de nosotros, que este fuera de nuestro control y que alterará el curso de nuestra vida y las consecuencias de nuestras acciones.
El perfeccionista cuando no gana pierde. Si no es el mejor, se siente el peor.
La aceptación es el primer paso hacia la plenitud para ser felices.
La felicidad es una forma de caminar por la vida.
Dejar de compararse y ser uno mismo. Ganar seguridad interior.
El odio puede envenenar un organismo pero únicamente si es inconsciente y lo dirigimos hacia personas de sustitución. Si lo reprimimos, lo pagamos con nuestro cuerpo.
Gratitud, optimismo, compromiso...
Nuestra felicidad depende de nosotros en gran porcentaje.
La felicidad consiste en sentir gozo, estar contento y vivir un estado de bienestar, combinado con la sensación de que nuestra vida es buena, tiene sentido y vale la pena.

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