Disfruta de tu tiempo:

Hambre de afecto...
Quien mueve las piernas mueve el corazón.
La gratitud es la base de la solidaridad y la cooperación social.
Mantener la esperanza.
Tal vez no sepas ni por dónde empezar a buscar el camino, pero lo importante es no detenerse.
Tener esperanza significa estar dispuestos en todo momento a lo que no ha nacido aún, pero sin desesperarnos si no lo hace durante nuestra vida.
Todos estamos en el arroyo, pero algunos miramos las estrellas.
Ningún amanecer nos encuentra allí donde no sorprendí el ocaso.
En lo profundo del invierno, por fin aprendí dentro de mi que hay un verano invencible.
Para su felicidad, el hombre no solo necesita disfrutar de eso y aquello sin tener esperanza y espíritu de empresa y de cambio.
Incluso después de una mala cosecha debe hacerse la siega.
Aprende a contactar con tu silencio interior y entérate de que todo en el mundo tiene un motivo.
No hay errores ni coincidencias. Todos los acontecimientos son bendiciones para que aprendamos.
Más allá del yo físico, más allá de tus pensamientos, hay un reino de pura esperanza. Desde allí, todo es posible.
 Anota todo lo pendiente.
 Empieza por lo que es más apremiante.
 No lo dejes para el final.
 Aprovecha los tiempos muertos.
 Sé realista con tus propósitos.
 Aprende a delegar en los demás.
 No temas a negarte a ciertas peticiones.
 Atiende todas tus esferas vitales.
 Encuentra una motivación personal.